El lenguaje es una herramienta creativa, al igual que la paleta y las brochas de un pintor. El aprendiz de pintor, tras familiarizarse con sus herramientas y adquirir los conocimientos teóricos necesarios para su manejo, realiza un aprendizaje basado primero en la copia de originales -de obras ya creadas o de objetos naturales-, que tendrá como objetivo final aprender a crear sus propias obras, para lo cual el maestro le animará a plasmar sobre el lienzo el resultado de su propia creatividad. Esta última fase del aprendizaje implica una producción mucho más imperfecta, con mayor o men…
Contenido publicado en
Revista Aula - Número: 137 (December 04)
EDUCACION PARA UN PRESENTE SIN VIOLENCIA / LA ORG.POR PROYECTOS EN LA EP- ISSN: 1131-995X
- Editorial Graó
- Eva Tejero